Blog de Héctor Santcovsky

un blog para reflexionar sobre política, sociedad y retos de futuro

12/4/12

El FMI y la cuestión de las pensiones

Que duda cabe que el don de la oportunidad nunca ha sido un punto fuerte en los organismos internacionales. Diría más, si hiciésemos propia la sentencia de Duke Ellington que “los problemas son oportunidades para demostrar lo que se sabe” nos encontraríamos con otro de los fiascos a los que nos tienen acostumbrados los diversos portavoces del fatalismo económico – histórico que conforman la larga pléyade de consultores de ciertos organismos multilaterales de financiamiento, abusando una vez más de falta absoluta de sentido de la oportunidad, y por ende una importante ignorancia de los problemas reales que conforman el tema en cuestión.
Las pensiones siempre son un buen termómetro de cómo se quieren poner en cintura un país. Es casi risueño leer recomendaciones que hablan de fondos privados, cuando aun duran en USA los ecos de la rapiña que han significado las quiebras (fraudulentas y muy poco receptoras de medidas punitivas) de ENRON o Lehman Brothers que han dejado en la más absoluta ruina a mucha gente que tenía todos sus ahorros en dichas entidades. ¿Y, ha pasado algo? Pues no, solamente que hay más pobres mayores de 70 años en USA y que en muchos restaurantes de comida rápida encontramos ancianos limpiando las mesas y sirviendo burritos o hamburguesas. Inclusive el propio ayuntamiento de Nueva York ha creado una línea de trabajo para proteger a este colectivo, como una “política más” para la tercera edad. (formación ocupacional, oficina de empleo, etc.)
Lo que no se dice es que ahora una inyección de dinerito fresco de contribuyentes miedosos en fondos de pensiones sería una balón de oxígeno formidable para las maltrechas finanzas del capital internacional occidental. Así y todo, poner dinero para que un grupo de jóvenes desaprensivos y poco cerebrados jueguen al casino financiero (invertir con dudosos criterios que van más allá del rápido beneficio) desde Singapur (por poner un ejemplo) sin prestar atención a las necesidades reales de los países (y si no que le pregunten a Rajoy, Montoro y De Guindos el valor de sus esfuerzos y recortes delante de un mercado tan ávido de sangre y carnaza fresca) no es muy estimulante para los ahorros de muchas personas.
Por último, el tema es que se necesita aumentar el número de cotizantes en economía productiva y competitiva. Y eso se hace con más inversión real, más jóvenes capacitados en el mercado de trabajo, más emprendimiento y más exportación. Y eso es lo que puede salvar el sistema. Lo siento, disminuir la productividad y solo atacar el tema desde el ahorro personal no es el camino. Particularmente porque si no se trabaja, dudo que se pueda ahorrar. Y, preventivamente, si es tan grave el tema lo que cabe es aumentar vía impuestos y cotizaciones de trabajadores y empresarios la participación en la cesta jubilatoria. Lo otro es el viejo cuento del esfuerzo ciudadano y la privatización de los sistemas previsionales. Y ese ya le conocemos, y solo hay que preguntarles a argentinos y chilenos que tal les ha ido.